Tijeras Solidarias festeja su primer año de cortes de pelo gratuitos

El grupo Tijeras Solidarias cumple un año de vida hoy y tiene la enorme satisfacción de decir que en este lapso creció a pasos agigantados. Los peluqueros que cortan el cabello sin costo a niños y adultos sin recursos de la ciudad de Córdoba ya no son sólo siete como hace doce meses, sino más bien cincuenta y seis.
Y el grupo se convertirá pronto en ONG nacional. En verdad, la idea solidaria germinó y se expandió a todo el país, a tal punto que hoy día más de 800 peluqueros de dieciseis provincias son parte de la movida solidaria.
El último día de la semana último, los peluqueros cordobeses fueron a la institución Portal de Belén a hermosearle el pelo a numerosas mamás. Además, se interiorizaron de que al sitio le hace falta elementos de higiene, por lo que se contactaron con la Clínica del Sol y acordaron que este centro médico done botiquines de primeros auxilios una vez al mes.
Meses atrás visitaron el merendero Mis Pequeños Piecillos, en villa El Nailon, y atendieron a niños de un merendero de La Calera, además de ampliar y pintar el inmueble donde marcha.
El 26 de noviembre, los peluqueros estarán en el merendero El Rincón de Luz, para cortarles el pelo a los niños.
Hasta mediados de 2018, Tijeras Solidarias tiene agendadas distintas acciones, a razón de una por mes.
Un año de historia
Tijeras Solidarias nació el treinta de octubre de 2016, con siete peluqueros de Córdoba. La iniciativa fue impulsada por Viviana Godoy, quien trajo de Europa la idea de recortar el cabello sin coste a pequeños y adultos de condiciones humildes. Mediante mensajes vía WhatsApp con colegas suyos, se pusieron conforme y convinieron hacer algo por los demás.
La primera cruzada solidaria se hizo en la parroquia Jesucristo Salvador del Planeta, de distrito Comercial, con el trabajo gratis de veinta peluqueros.
Entonces, la acción solidaria fue “prendiendo” en otros lugares del país. El día de hoy, más de ochocientos peluqueros de dieciseis provincias integran Tijeras Solidarias.
Mas los peluqueros no sólo retocan las cabezas de gente con necesidades, sino que consiguen mercaderías, ropa, bebidas, leche en polvo y larga vida, pañales, tablones y sillas, entre otras cosas, mediante donaciones.
“En todos y cada sitio que vamos, preguntamos qué necesidades hay y tratamos de satisfacerlas”, comentó Godoy.