¿Para Qué Sirve la Ozonoterapia y Cómo se Usa?

El ozono médico se prepara a partir de oxígeno médico puro mediante una descarga eléctrica sigilosa para su uso como una mezcla de ozono/oxígeno en una concentración y dosis precisas reguladas y administradas por un profesional médico.

Dado que la molécula de Ozono no es estable, se prepara su forma médica donde se utiliza mediante un generador o una parcela singular, que cuenta con reguladores para la concentración precisa que requerirá la condición a tratar.

¿Cuáles son sus beneficios para la salud?

La ozonoterapia tiene un fuerte efecto desinfectante, fungicida y virostático: con la que se utiliza mucho para desinfectar heridas, y por tanto, para tratar enfermedades provocadas por bacterias y virus.

Su capacidad para promover la circulación lo hace útil en los trastornos circulatorios e invaluable para revitalizar las funciones orgánicas.

La terapia con ozono reactiva el sistema inmunológico (mejora las defensas del organismo) lo que lo hace sumamente útil para activar la respuesta inmunitaria en pacientes con un sistema de defensa debilitado.

El ozono también activa el sistema antioxidante y eliminador de radicales del cuerpo, razón por la cual el ozono es útil en enfermedades que generan inflamación crónica.

¿En qué enfermedades es útil?

Por sus propiedades, el ozono médico tiene aplicaciones en los siguientes campos de la salud:

  • Tratamiento para combatir los trastornos circulatorios y geriátricos (personas mayores)
  • Tratamiento de enfermedades causadas por virus, como: hepatitis (infecciones del hígado) y herpes.
  • Tratamiento de heridas infectadas y procesos inflamatorios similares tales como: úlceras abiertas de las piernas, inflamación intestinal (colitis, proctitis), quemaduras y heridas infectadas, infección por hongos y otros gérmenes, infecciones vaginales persistentes, infecciones de oído, infecciones de garganta, infecciones sistémicas, etc.
  • Tratamiento del dolor.

Es en este último campo de la medicina que se tuvo la oportunidad de seguir desarrollando las aplicaciones directas del ozono y hoy se aplica a todo tipo de síndromes de dolor, como:

  • Dolor de articulaciones: hombro, codo, muñeca, cadera, rodilla, tobillo y dedos aplicando ozono directamente sobre la articulación dañada.
  • Síndromes de dolor de columna: dolor por hernia de disco, lumbalgia, ciática, discartrosis, osteoporosis, fracturas de columna, lesión de los tendones y músculos que sostienen la columna.
  • Dolor de los atrapamientos nerviosos: síndrome del túnel carpiano (dolor en las manos).
  • Síndrome del túnel del tarso.
  • Síndrome de salida torácica.
  • Síndrome del músculo piriforme: un atrapamiento profundo del nervio ciático en la región glútea que causa dolor a lo largo del nervio ciático, que puede confundirse con una hernia de disco lumbar.
  • Tendinitis: codo de tenista y codo de golfista (dolor de codo), tendinitis de los ligamentos de la rodilla (dolor de rodilla), tendinitis de tobillo.
  • Bursas: son bolsas especializadas que se utilizan para prevenir rozaduras en áreas del cuerpo donde hay mucho movimiento, generalmente cerca de las articulaciones. La bursa puede inflamarse por un uso excesivo o incorrecto, provocando un dolor que puede ser muy severo y también incapacitante, esta inflamación dolorosa mejora excepcionalmente hasta la inyección directa de ozono en la bursa inflamada.
  • Neuralgia trigeminal: Es un dolor que afecta a uno de los nervios más esenciales del rostro, es un dolor de tipo “choque eléctrico” extremadamente intenso, que ocurre al cepillarse los dientes o masticar. La experiencia que hemos acumulado con el ozono en esta zona ha sido muy positiva, observándose una rápida desaparición del dolor luego de la inyección directa de ozono alrededor de las principales ramas del nervio.
  • Dolor de cáncer: También hemos observado alivio del dolor aplicando ozono cerca de plexos agitados dañados por un tumor, por ejemplo, tumores del ápice del pulmón que comprimen el plexo braquial al reducir la inflamación causada por el tumor.
  • Dolor por neuropatía diabética.
  • Dolor por lesión traumática de los nervios: dolor regional complejo tipo 1 y dolor regional complejo tipo 2 (causalgia) y otras neuropatías postraumáticas.
  • Como tratamiento adyuvante en múltiples tipos de cáncer y como fármaco anti-envejecimiento y acondicionador.