CÓMO SE PREPARA UN CÓCTEL CON REFRESCOS

1. REFRESCOS, INGREDIENTES ESENCIALES DE UN CÓCTEL.
En un coctel, un refresco sirve para crear destellos en el paladar (puedes aprender mas de ellos en un curso de cocteleria o en un curso de bartender). La gran pluralidad de sabores y de categorías que existen tornan posibles combinaciones infinitas llenas de originalidad y sofisticación.
Cada refresco tiene unas peculiaridades de sabor, aroma, intensidad, amargor o bien dulzor que sirven para fortalecer y destacar las cualidades de una mezcla. De esta forma, por servirnos de un ejemplo, un coctel que incluya una bebida refrescante con gas acentuará el sabor y el aroma y le dará cierta acidez. En lo que se refiere a los sabores, asimismo se pueden emplear para resaltar o bien disfrazar alguna característica del combinado. Por servirnos de un ejemplo, un refresco de limón va a disimular el dulzor de sus elementos al paso que otro de cola puede contrarrestar la acidez.
Además de esto, dependiendo de la hora del día a la que se tome el combinado va a haber siempre y en todo momento un refresco ideal que nos dejará gozar de la mañana, abrir el hambre, hacer la digestión tras una comida o bien recrearnos en una tarde entre amigos.
Cola. Los refrescos de cola tienen un equilibrio singular en su sabor, entre la acidez y el dulzor. La intensidad y dificultad de sus aromas los hace apropiados para ser los cócteles que se toman desde media mañana pues despiertan el hambre en su justa medida.
Naranja. De manera inconsciente los refrescos de naranja se asocian con la mañana y son muy empleados en los combinados que se preparan en estas horas del día. Su dulzor predominante y su acidez de mayor o bien menor intensidad los transforma en el ingrediente esencial para los combinados cítricos.
Limón. En los refrescos de limón prevalecen los toques ácidos y las notas cítricas de la fruta, lo que le da al coctel una sensación más viva y fresca. De ahí que, el mejor instante para tomar un combinado a base de limón es en las horas anteriores a el alimento o bien la cena.
Lima-Limón. Las bebidas de lima-limón combinan los sabores dulces y ácidos, ofertando siempre y en toda circunstancia una sensación de frescor incomparable que se fortalece con su color transparente y sus burbujas. Es precisamente por esto que se encuentran entre las preferidas en el momento de realizar los mejores cócteles, sobre todo aquellos concebidos para tomar a media mañana o bien a media tarde.
Tónica. En la tónica prevalece un toque amargo, matizado por un leve dulzor y un gusto cítrico. Es una bebida muy refrescante, apropiada para cualquier hora del día. Combina en especial bien con mezclas elaboradas con frutas.
Bitter. Es un refresco que reúne una cantidad suficiente de notas ácidas bajo el predominio de un fondo amargo. Además de esto, su color colorado intenso transforma a la mezcla en un combinado increíble y atractivo que le da un toque muy elegante y complejo.
Gaseosa. Desde sus orígenes la gaseosa ha sido siempre y en toda circunstancia la bebida refrescante preferida como acompañante de otras. Apropiada para cualquier instante del día, su bajo aporte calorífico la hace ideal para los cócteles más ligths.
Cada refresco puede dar sitio a un coctel sorprendente y complejo. La pluralidad de bebidas refrescantes abre un planeta de posibilidades en el que el único límite es la imaginación.
dos. CÓMO SE ELABORA UN CÓCTEL REFRESCANTE.
Realizar un coctel es como hacer una buena película. Los actores son un ingrediente primordial. Mas para tener un buen largometraje no es suficiente, hay otros elementos como el decorado o bien la fotografía que juegan un papel esencial.
Con los cócteles ocurre lo mismo. Saber qué ingredientes y refrescos vamos a usar en función de nuestros gustos, de la temporada del año o bien de la hora del día en el que los vamos a degustar es lo más esencial, mas no lo es todo. Conocer unos pequeños trucos sobre de qué manera presentar el combinado, el recipiente más conveniente, la temperatura ideal y las posibilidades de decoración que existen nos va a ayudar a crear un combinado perfecto. Los consejos básicos de los especialistas en el momento de servirlo son sobriedad, elegancia y sencillez. De esta manera pues… luces, cámara… ¡acción!
dos.1. La mezcla, la base de un buen coctel.
En un caso así el orden de los factores sí altera el producto. Los especialistas insisten en que en el momento de entremezclar los ingredientes es fundamental tomar en consideración que las bebidas refrescantes, si tienen gas, deben añadirse al final, inmediatamente antes de servirlo, puesto que, si se agitaran en la coctelera, se podrían perder las burbujas y, por tanto, su efecto refrescante y potenciador del sabor.
La elección de los instrumentos que se empleen en el momento de realizar el coctel va a influir en la mezcla. Se pueden emplear, a priori, una coctelera o bien un vaso mezclador.
dos.2. La elección del cristal.
La mezcla ya está preparada y, en consecuencia, el sabor ya está asegurado. Lo esencial ahora es, puesto que, la presentación. La temperatura, los ornamentos y hasta la manera, la textura y el tamaño de los recipientes en los que se sirve, que reciben el nombre de cristal, son factores clave en el momento de percibir la esencia de una buena mezcla. Los cócteles siempre y en todo momento deben servirse friísimos para sostener su aspecto, fragancia y sabor a lo largo de más tiempo. En el momento de presentarlos, existen vasos y copas de miles y miles de formas y tamaños. Cada bebida tiene su cristal perfecto… ¡solo es cuestión de localizarlo!
Copa de coctel. Muy elegante y bien proporcionada, tiene la manera de un cono invertido, con una boca ancha y un pie largo que resguarda el contenido de la copa del calor de la mano. Se emplea para aquellas mezclas que no llevan hielo, puesto que en ella no cabe mucho líquido. Su abertura debe tener espacio para poder contener una rodaja de fruta o bien una cereza sin que se hunda demasiado.
Vaso Old Fashioned. Se considera un tradicional en el planeta de la coctelería. Es ideal para servir conjuntados con mucho hielo y lograr la temperatura ideal.
Vaso alto o bien cilindro. Es alargado, alto y estrecho, con lo que en él se acostumbran a servir los tragos largos con mucho hielo. Se conoce asimismo como Highball, Collins, Tumbler o bien Long Drink.
Copa balón. Debe llenarse solo a medias, o bien aun menos, para poder degustar bien las bebidas merced a su aroma. Su estética destaca singularmente los tonos de la mezcla, su forma deja servir los combinados frescos con anchos cubitos de hielo y su tamaño permite agregar rodajas de naranja o bien limón, dándole un singular toque de elegancia.
Copa Hurricane o bien Tulipa. Es muy afinada y muy elegante, ideal para servir cócteles caribeños o bien de frutas.
Copa flauta. Su forma alargada y de poca abertura ayuda a sostener las burbujas propias de las bebidas espumosas y de los refrescos que las acompañan.
Una vez escogido el vaso hay que añadir el hielo, que es un ingrediente esencial que destaca todas y cada una de las propiedades de un refresco y de un coctel. Se puede agregar en diferentes formas en dependencia de lo que se quiera trasmitir.
Pillée. Es el hielo picado que da al coctel una apariencia de glamur y sofisticación.
Frappé. Está picado a puntito de nieve, bien a mano o bien con batidora. Se emplea para bebidas cortas de entre cincuenta y cien mililitros pues se funde velozmente.
Fizz. Tiene forma de lámina o bien canica y se emplea para enfriar de forma rápida el coctel. Recibe su nombre de forma onomatopéyica, por el sonido que hace al caer sobre el cristal en el que se sirve.
Piedra. Es el más habitual. Con forma de cubitos, señala que la bebida con la que se sirve quita la sed.
Con el hielo dentro, ya solo queda verter el coctel desde el vaso mezclador o bien la coctelera. ¡Cuidado! Los especialistas advierten que, con independencia del recipiente que se haya escogido para el combinado en cuestión, solo hay que ocupar sus 3 cuartas partes. De nuevo, la sobriedad en coctelería está presente.